top of page

Agrabah

¡Hola! ¿Hmm? ¿El genio te ha dicho que vengas? Entonces permíteme darte una calurosa bienvenida. ¿Quieres comer o beber?  Sírvete tú mismo. 

​

Mi marido está en la ciudad, atendiendo el orfanato local así que no podrá recibirte. Me llamo Jasmine y soy la sultana de la ciudad desde que mi padre decidió abdicar y pasar el resto de su vejez de retiro espiritual sin tener que atender a sus obligaciones. 

​

Estos últimos veinte años sin Jafar ni  otros malhechores rondando por Agrabah han sido prósperos y hemos diezmado la pobreza extrema, pero aún hay mucho en lo que trabajar. 

​

Las obras de artesanía, particularmente orfebre y textil, son particularmente cotizadas en todo Auradon y, si bien es cierto que no podemos erradicar la miseria ni con todos los bienes de palacio, nos ocupamos de que todos los habitantes del reino aprendan un oficio. 

ae9032e5324176262ecd9ad019287ef1.jpg
bottom of page